Practicar el antiguo arte bonsái en tu hogar puede tener decenas de beneficios.
Tener una planta en casa siempre será una gran idea. No solo porque son perfectas para la decoración de tu hogar, sino porque ofrecen beneficios adicionales a tu salud. Es por ello que cuando decides tener una, tu hogar se convierte en un ambiente libre de impurezas y cargada de buena energía. Pero tener una planta también requiere de cuidados específicos y por ende, de una cuota de responsabilidad; aunque si deseas cultivar un bonsái la historia puede ser muy diferente. El bonsái se conoce como el arte de cultivar árboles y plantas con características muy particulares, controlando su tamaño a través de técnicas como la poda, el alambrado, el pinzado y el trasplante. Este tipo de arte asiático también conocido como Penjing, está asociado a la buena fortuna y a la eternidad, y es practicado desde hace dos mil años en la China, cuando los monjes colocaban en macetas árboles pequeños en las escaleras de los templos e incluso les rendían culto. Resulta que esta antigua práctica que consiste en darle las características de un árbol de la naturaleza a un árbol en maceta, hoy se ha hecho muy popular. Si aún no sabes, es hora de que conozcas algunas de las razones por la que deberías cultivar un bonsai en casa. Razones cultivar un bonsái Energía positiva Hay una gran variedad de razones que podrían convencerte de empezar a cultivar un bonsái en casa, pero si te hablamos del relax que te ofrece, seguro que captamos la atención. Resulta que la tarea de cultivar un árbol en una maceta y dedicar tiempo a darle características muy particulares trae consigo una terapia contra el estrés muy efectiva. Si dedicas un tiempo a podarlo y cuidarlo podrás dejar atrás tu ansiedad y emociones negativas, y te recargarás de energía positiva. El arte del bonsái está asociado a energías positivas, porque la aportan la madera y la tierra, dos de los elementos principales que, según el Feng Shui, atraen las buenas energías. Un arte vivo y natural Usando el arte del bonsái cualquier especie de árbol puede ser cultivada, todo se trata de aplicar las técnicas necesarias para mantenerlo del tamaño que se desea podando su tronco, hojas y raíces cada cierto tiempo. El bonsai evoluciona de acuerdo a los cuidados que reciba de parte de la persona. Todos ellos suelen dar un atractivo natural y extraordinario a tu casa, por ello ha sido considerado el “arte sin fín”. Debes saber que puedes cultivar bonsái distintos y hacer que cada uno de ellos ofrezca una hermosa vista a quienes lo cuidan y mantienen en sus espacios. Incluso algunas de las especies que más se usan para el bonsái cambian según la estación, florece, se deshoja y vuelve a florecer. Una planta para siempre Los árboles que se usan para el bonsái pueden durar largos años. Incluso se dice que si uno de estos pequeños árboles se cultiva en una generación puede convertirse en una reliquia de la familia, por ello cuando se regala un bonsái se está deseando a la persona una larga vida. Se trata de una especie que debe ser podada, regada, abonada para que pueda pasar de generación en generación en tu familia y se puede convertir en un símbolo de amor y respeto. Para la buena suerte Cuando los monjes budistas introdujeron el arte del bonsái a Japón en el año 794 a.C., este se asoció de inmediato a la fortuna y la buena suerte. Desde entonces, cuando se decide cultivar un bonsái en casa solo atraerá la buena fortuna y las energías que toda persona necesita para su día a día. Compromiso emocional Cuando decides cultivar un árbol bajo de arte del bonsái comienza un apego similar al que adquieres con una mascota. El compromiso emocional que asumes al cultivar este pequeño árbol en casa, es extraordinario y te ayuda a crecer como persona. Si quieres cultivar un bonsái en casa ya tienes las razones para hacerlo. Quienes deciden llevar esta antigua práctica a casa aseguran que el pequeño árbol se convierte en un compañero extraordinario cargado de buena energía y es para toda la vida.
